Este líquido se desplaza por una serie de conductos y mangueras dentro del sistema de frenos. Al pisar el pedal, el líquido se mueve y multiplica la fuerza del pedal para cerrar las pinzas o los tambores de freno, logrando así que el vehículo se detenga.
La importancia del líquido de freno radica en su capacidad para mantener la seguridad del vehículo y de los ocupantes. Permite que la fuerza del pedal de freno se transmita eficazmente para detener el coche, y su mantenimiento adecuado es esencial para evitar problemas como la corrosión del sistema o la pérdida de potencia de frenado.


Esto son Algunos Dima TIPS!!! Liquido de Freno
- Cambios Periódicos: Se recomienda cambiar el líquido de freno cada dos años o según las indicaciones del fabricante para evitar la absorción de humedad que puede reducir su efectividad.
- Uso del Líquido Adecuado: Utiliza siempre el tipo de líquido de freno recomendado por el fabricante de tu vehículo.
- Revisión Regular: Es importante revisar el nivel y el estado del líquido de freno regularmente.
- El líquido de frenos se aloja en un circuito cerrado, pero con el paso del tiempo va perdiendo sus propiedades y debe ser sustituido. La razón es que se trata de un líquido higroscópico, es decir, qué atrae y absorbe la humedad. Esto es importante porque gracias a ello impide que el agua provoque corrosión y congelación. Pero, como contrapartida, el porcentaje de humedad presente en el líquido de frenos aumenta progresivamente y, si no se cambia, acabará formando burbujas de vapor, corrosión en los conductos y un incremento del desgaste de los pistones.